La Prensa: el malo y los santos
Nota- Diego Ramirez – Uruguay Montevideo
Se acercan cada vez más las elecciones presidenciales en Estados Unidos el martes 3 de noviembre y por eso es importante sacar algunos apuntes. Luego de el horrendo asesinato de George Floyd cometido en forma totalmente inhumana por la policía en Powderhorn, en la ciudad de Mineápolis, Minesota, se desataron una serie de manifestaciones pacíficas que derivaron en grupos ultraviolentos que llevaron el caos “seguramente teledirigido por intereses políticos al igual que en México” a más de 50 ciudades del país dejando a su paso saqueos, incendios, asesinatos y heridos por doquier. Casualmente vemos un parecido muy grande de estas manifestaciones con distintas manifestaciones que se han dado a lo largo de la historia reciente para derrocar gobiernos como los alzamientos de la primavera árabe o el golpe de estado en Ucrania o los intentos de golpe en Venezuela o también el intento de golpe en Turquía y podemos seguir así mucho rato. Todos somos conscientes de la atrocidad que cometieron al asesinar a George Floyd y nada puede justificar este hecho y nada puede permitir que no se haga justicia, pero también debemos diferenciar los intereses de la prensa y distintos actores políticos a la hora de estar totalmente indignados y “consternados con el racismo”.
Para ello tenemos que tomar en cuenta los siguientes puntos. Primero es importante aclarar que el número de asesinatos en general en Estados Unidos ha caído notoriamente desde la salida de Barack Obama en el 2017. Durante el Gobierno de Obama se pasó de casi 13000 muertos a un aumento constante para llegar a más de 15000 llegando a niveles históricos de asesinatos. Al dejar Obama la Casa Blanca en el 2017 se produjo una caída hasta llegar a los 14000 asesinatos. Pero también cuando hablamos de asesinatos de personas negras, en el 2016 fueron más de 8000, luego de la salida de Obama se bajaron las muertes muertes a casi 7400 asesinatos de personas afrodescendientes. Esto tampoco son cambios radicales y quizás ni tienen que ver mucho con las políticas, pero lo que sí nos deja entrever es la inclinación y el poder que tiene la prensa para primero indignar y luego movilizar a grandes cantidades de personas en busca de los intereses políticos de algunos, igual después a último momento hay tiempo para largar un poco de verdad para no quedar tan mal como están haciendo ahora en el New York Time explicando que al final lo de Bolivia fue un golpe de estado por culpa de los malos procedimientos de la OEA. Lo cierto es que desde que se fue Obama estados unidos había logrado también bajar la tasa de desempleo en el país y el crecimiento de Estados Unidos se mantenía en forma constante hasta que llegó la Covid-19 y comenzó a derrumbar lo que se veía desde lejos como una victoria asegurada en la elecciones de Noviembre, pero también más tarde llega el asesinato de Floyd y la prensa comienza a movilizar sus piolines para poner a Trump en el banquillo de los acusados. Aquí también como en otras operaciones similares podemos ver mas o menos las mismas consignas y los mismos tipos de equipamientos avanzados para movilizarse y enfrentar a la policía. En segundo lugar vale aclarar en momentos en que se pone a Trump como un sanguinario inescrupuloso, que en verdad considero que lo es!, pero a pesar de ello, lo interesante del asunto es que quieren crear una imagen angelical de Joe Biden y de los demócratas que dista muchísimo de la realidad. Pero como no pudieron sacar a Trump tras el impeachment impulsado por los demócratas en diciembre del 2019 que culminó con la absolución del presidente Donald Trump el 5 de febrero del 2020, seguramente se comenzaron a tomar otros caminos para quitarle del medio.Para muestra vale recordar en estos momentos que tanto se evoca a Obama por sus logros, que Barack Obama fue el presidente de los Estadounidenses que en más guerras estuvo metido, participó directamente de 7 guerras importantes. A los pocos meses de ganar (en 2009) su Nobel de La Paz, Obama ordena enviar 30000 soldados armados a Afganistán. En el 2011 participa de las operaciones para derrocar y ejecutar a Muamar Gadafi en Libia y para que no haya errores envió personalmente a Hillary Clinton su Secretaria de Estado que luego se jacta de la tarea cumplida modificando entre risas una frase de Julio César para decir “Fuimos, Vimos y él Murió” en referencia a Gadafi recién asesinado en ese entonces, desde la muerte de Gadafi no solo Libia se ha convertido en una lucha constante entre grupos para dominar las distintas zonas del país, sino que también desaparecieron millones y millones de dólares del pueblo Libio que Gadafi tenía en bancos Europeos y hoy los Libios pasaron de ser el país con el mejor nivel de vida de África a ser un país con grupos radicales en guerra constante y con distintas potencias ayudando a distintos bandos, por esto corre peligro de convertirse en otra Irak o Siria. Las guerras en Irak y en Siria fueron producidas tras la unión descomunal y sangrienta producida por el Estado Islámico y los Estados Unidos, en donde la propia Hillary Clinton asumió que fueron ellos mismos los que armaron a el ISIS ( Estado Islámico ) y también reconoció que al final se les había ido de las manos. Obama en el año 2014 envio atacar y bombardear Siria e Irak sin el consentimiento de nadie más que el de él
mismo, al punto que se dice que en algunos momentos llegaron a caer tres bombas por hora matando cantidad de terroristas y de civiles. Obama vivió su presidencia en guerra constante al punto que los funcionarios del pentágono hablaban de la situación bélica catalogandola como una “Nueva Normalidad”. También participó en ataques con drones para ejecutar personas en Pakistán, Somalia y Yemen en donde a causa de estos ataques murieron cientos de civiles y se dice que afinando los números serían miles. También debemos recordar que Barack Obama es el que mandó capturar a Osama Bin Laden para ejecutarlo y tirar su cuerpo al mar ante la pasividad total del mundo entero pasando por encima de todo tipo de derechos humanos, todo esto el “Premio Nobel de la Paz”. También fue el que comenzó los conflictos con China, el que apoyó el golpe de estado en Ucrania, el que también apoyó el Golpe de estado en Honduras y guardó silencio cuando el golpe llegó a Brasil para encarcelar injustamente a Lula y para quitar del medio insolitamente a Dilma. Otro dato interesante es que Obama es el presidente de la historia de Estados Unidos que realizó más deportaciones en ese país, por lo que se estima que expulsó del país entre dos y tres millones de personas con lo que se gano el titulo de “Deportador en Jefe” por toda la comunidad Latina.
Durante el mandato de Obama la deuda Pública aumentó casi un 90% cerrando su gestión con un país con creciente déficit. Donald Trump a su vez ha tratado de no participar en guerras y se ha declarado contrario a las mismas pero también las utiliza para hacer sus negocios y siempre intenta traer a los soldados a su país. También gestiono el ataque al general Iraní Soleimani que fue un gran error que cometió seguramente incentivado por su yerno Jared Kushner y el gobierno Israelí y que puede llegar a pagar muy caro en las elecciones presidenciales. Se salió de todos los tratados como el tratado de París por el cambio climático, el tratado Nuclear con Irán, el tratado de eliminación de misiles de corto y mediano alcance firmado en el 1987 con la Unión Soviética, también llevo el tema con China a una guerra comercial de negociación constante y ha tratado de mejorar sus relaciones con Rusia en lugar de fortalecer sus lazos con Europa para continuar rodeando a Putin tocando tambores de guerra como lo venía haciendo Obama entre risas, aunque no tendría problema en hacerlo. Es arrogante, soberbio, racista y clasista, también es capaz de hacer cualquier cosa por el poder, pero los que juegan al otro lado con Biden no tienen límites, son los que proyectaron todas las guerras en medio oriente y en distintas partes del mundo y lo dijeron abiertamente, y están apoyados por las cadenas de prensa más grandes del mundo y por las más grandes multinacionales, además de contar con las redes sociales en general y tienen el poder como para desestabilizar lo que ellos quieran con tal de conseguir sus objetivos politico-economicos. Atrás de Biden están los Clinton, los Obama, los Rothschild, los Soros y todos sus súbditos que manejan América casi que entera y a sus anchas a través de sus medios de prensa y de producción. Por algo durante todos los años de Obama en el poder se le mantuvo como un ejemplo de presidente y hoy quieren unir a Biden a esa imagen por haber sido el Vicepresidente de Obama,el Premio Nobel de la Paz. Mejor no tocaremos el tema del “Obamagate” que apunta a que, durante el gobierno de Barack Obama en la Casa Blanca, se habría creado, un ‘Estado profundo» que opera en paralelo y que, tras dejar la Presidencia Obama, ha seguido operando en la cúspide del poder norteamericano, con el objetivo de hundir la Presidencia de Trump, hasta ahora nada en concreto y nada que la gente no pueda imaginar.
Lo cierto es que en estos momentos la prensa de Estados Unidos casi en su totalidad está golpeando en forma constante a Tump para que no llegue a ser reelecto y la verdad es que en el fondo de todo este asunto,se nos ha dejado entrever que quienes están contra Donald Trump son en verdad los más peligrosos en este juego que en estos momentos en que Estados Unidos ha perdido su poder y su imagen frente al mundo y en momentos en que la economía se vuelca totalmente a China, en momentos en que se comienzan a cambiar las reglas del juego e ingresan más participantes a la mesa, la historia nos muestra que estos personajes son capaces de iniciar una guerra nuclear con China o desatar el horror en medio oriente, o barrer completamente con México y Venezuela. Trump también es capaz de todo eso, pero es evidente que en el caso de el no son sus prioridades y que prefiere intentar otros caminos antes, aunque en este momento lo vienen acorralando con una “guerra civil”.
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Foto: AP
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